martes, 14 de julio de 2009

La izquierda y la derecha... simplificadas - 2da y última parte

1) Derecha e Izquierda son hoy día un discurso político. Lo extraño es que son un discurso político utilizado solamente por quienes dicen ser de izquierda. No conozco a ningún político acusado de ser de derecha hablar en estos mismos términos de sí mismo. Ni tampoco parece ser muy útil hoy día acusar a alguien de ser de izquierda, más cuando el Che Guevara está de moda en remeras, películas y volantes de fiestas, y el dictador Fidel Castro ya resulta simpático de lo viejo y conocido que es.

2) He escuchado varias definiciones teóricas sobre qué es la derecha y qué es la izquierda, y las he encontrado interesantes aunque demasiado complejas como para que tengan algo que ver con lo que comúnmente se entiende al escuchar estos conceptos. Hay una definición popular, al menos aquí en Buenos Aires, que hace que todos los que no nos especilizamos en teoría política podamos igualmente darle vuelta al asunto durante largas conversaciones de café u oficina.

3) Mi mirada de adulto, tal vez no tan alejada de aquella de niño como me gustaría creer, encuentra que estas palabras, que indican direcciones opuestas, se utilizan no para hablar de política sino para hablar de cómo se piensa y siente uno frente al mundo.

4) Y encuentro una gran coincidencia con esa simplificación genial de mi profesor de filosofía. La clave está en la oposición entre esfuerzo y necesidad.

5) De izquierda es quien se ocupa de los débiles, que somos todos. Quien nos protege y se ocupa de nuestras necesidades.

6) De derecha es quien se ocupa de los fuertes, que somos todos. Quien nos empuja y se ocupa de nuestros actos.

7) Lo macabro de la izquierda es cuando los débiles pasan solamente a ser un selecto grupo de pobres almas en pena. Y siempre, siempre, el enunciante del discurso está entre los fuertes, pero se oculta a sí mismo señalando al supuesto débil y al supuesto poderoso abusador. Macabro porque se convierte en un juego de poder.

8) Lo macabro de la derecha es cuando no fortalece sino a una elite, e intenta debilitar a una mayoría disminuyendo sus oportunidades de mostrarse fuertes. Macabro porque se convierte en un juego de poder.

9) Sin embargo sigo viendo algo inconciliable entre necesidad y esfuerzo. Necesidad me remite a lo pasivo. Esfuerzo me remite a lo activo. De las ventajas psicológicas de ambas posiciones ya hablé en otro lado.

10) No es de extrañar que el discurso de izquierda esté de moda en un mundo donde el capitalismo se nutre de la pasividad y el facilismo de sus seguidores. El discurso de izquierda, el moderado de la nueva izquierda, no el comunista revolucionario extremo sino el revolucionario romántico, es el mejor amigo del capitalismo tercermundista de Argentina. Cuanto más necesitados y pobres nos veamos, tanto mejor para el partido único del gobierno y tanto mejor para los poderosos que siguen haciendo negocios que trascienden cualquier discurso.

11) Y de paso, el discurso de izquierda, ayuda a tapar cualquer discurso sobre la potencia, la responsabilidad, la honestidad, la apropiación y obediencia de la ley, el esfuerzo, el crecimiento, el sacrificio y la superación, tildándolos de discursos de derecha que niegan un lugar a esos pobres que bien acogidos como pobres están y seguirán estando bajo el discurso de la necesidad.

Safe Creative #0907154124579

3 comentarios:

  1. Yo paso. Me desmarco de los ismos, y de los istas, en todo caso crearé mi propia "secta", los jesusianos, que tendrá en común con el resto de las sectas (da lo mismo de lo que sean) el que para mi toda la pasta y todas las pavas.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
  2. De tus posts, éste es el que me parece mejor /y el más simplificado/, sobretodamente los puntos 7, 8 y 10, que me parecen geniales.
    Entiendo que es un poco lo que estás diciendo acá, pero me quedó pendiente de la otra vez que proponías que contáramos qué entendíamos por derecha, así que lo digo igual.
    Para mí la derecha se asocia directamente al liberalismo. La idea de que te merecés en proporción a lo que te esforzás es un pasaje directo al grupo de los de derecha, pasaje te vende uno de izquierda, por supuesto. También hablar de límites. Me han vendido un boletín a la derecha alguna vez que hablé de límites en general. Todavía me queda la cara de asombro de aquella vez.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  3. Jesús, tu secta me hizo recordar a un amigo muy creativo y exitoso que me comentaba hace poco que pensaba armar un partido político y presentarse diciendo "yo también te voy robar, la diferencia es que te lo digo de frente". Sería un interesantísimo experimento psicosociológico.

    Shirubana, no entendí mucho lo del boletín pero gracias igual por compartir con nosotros tu opinión. Concuerdo con vos en que los límites y el esfuerzo quedan del lado maligno en los discursos de izquierda: me pregunto qué clase de revolución se puede hacer sin esos dos conceptos.

    ResponderEliminar