viernes, 27 de febrero de 2009

Los 4 tipos de conocimiento

1) Conocimiento científico. Se caracteriza por poseer una articulación lógica interna en toda su estructura y por tener un correlato con la empiria. O sea, se utilizan razonamientos y principios lógicos para conectar lo conocido entre sí mientras que se debe poder al mismo tiempo corroborarlo mediante un experimento. Este tipo de conocimiento no puede ser comprobado (demostrada su verdad) pero sí debe ser falseable (tiene que permitir un experimento en el que, si se vieran ciertos resultados, se demostraría su falsedad).

Ejemplo: "Mi altura es de 187 centímetros. Un metro equivale a 100 centímetros. Mi altura es de 1,87 metros".

2) Conocimiento filosófico. Se caracteriza, al igual que el científico, por poseer una articulación lógica interna en toda su estructura. Sin embargo no tiene un correlato directo con la empiria, lo que significa que no habría experimento posible de ser realizado que demuestre su falsedad. No es conocimiento falseable, aunque sin lugar a dudas sí lo es discutible.

Ejemplo: "Mi altura es más conocida que mi anchura debido a que la dimensión de mayor tamaño en el ser humano es el alto. Si nuestro cuerpo hubiese sido más ancho que alto, viviríamos en una sociedad en donde nos impresionaría más la anchura de las cosas que su altura, y en donde los médicos al preguntarnos cuánto medimos se referirían irremediablemente a nuestro ancho".

3) Conocimiento místico. Es el conocimiento que deriva de la experiencia personal pero que no muestra una relación directa con la empiria ni se estructura lógicamente. Llega generalemente en forma repentina y se impone ante la persona que vive la experiencia mística con mayor peso que una comprobación empírica o el resultado de un razonamiento. Se lo señala en muchas ocasiones también mediante el término "intuición".

Ejemplo: "Mi altura pertenece tanto a mi ser como la altura de aquel árbol. He vivido y sentido esta conexión con el Universo, con Dios. Me he fundido en su eternidad y ni siquiera podía recordar qué significaba que hubiera algo llamado mi altura".

Estos tres tipos de conocimientos se interrelacionan y se retroalimentan, aunque generalmente la secuencia clásica sería: el conocimiento místico que alimenta al conocimiento filosófico que alimenta al conocimiento científico. Sin embargo hay aún un tipo más de conocimiento.

4) Conocimiento mágico. Es el conocimiento creativo por excelencia. No tiene sentido lógico, relación con la empiria ni deriva de experiencias personales. Este conocimiento es creado con elementos del lenguaje, mediante un juego de combinaciones y relaciones simples, que pueden incluso llegar a ser múltiples creando una sensación de complejidad. Sucede generalmente durante el periodo infantil de la persona, primero como forma de aprendizaje lúdica de las estructuras del lenguaje para luego alimentar la imaginación con los efectos de significación resultantes de dichas combinaciones discursivas. De adulto generalmente se lo utiliza con fines creativos artísticos, aunque la mayoría de las veces se lo intenta disfrazar de los otros tipos de conocimiento para darle un mayor efecto escénico.

Ejemplo: "Mi altura es exactamente igual a la que poseía el Rey Arturo. Esto lo sé porque anoche me dormí pensando en mi altura y soñé con una mangosta, que es el símbolo de los reyes, y en la radio, al despertar, la primera palabra que escuché fue arte, cuyas primeras tres letras coinciden con Arturo. Cuando me desperté eran las 3 de la tarde".


lunes, 23 de febrero de 2009

Neurosis Simplificada

Más sobre este post.

1) Neurosis es creer que uno es en realidad dos.

2) El punto uno no es tan disparatado como suena. Miremos por un momento el momento del soñar. En los sueños (y tal vez se note más en los llamados sueños lúcidos) nos sentimos enteros y conscientes. Y sin embargo hay un entorno en los sueños que no identificamos con nuestra persona. En un sueño veo un árbol y no pienso "vaya, ahí está una parte mía en forma de árbol". Pensamos que de alguna manera seguimos siendo el que observa y que otra cosa es la observada.

3) Al despertar pensamos, ¿cómo puedo ser yo quien creó el mundo que acabo de ver en mis sueños? Aunque jamás hubo creación, el mundo de mis sueños es una copia más o menos fiel del mundo de la vigilia. Pero, igualmente... ¿cómo puedo yo haberlo recreado?

4) Neurosis es creernos un individuo isla. Esa otra persona no tiene nada que ver conmigo. Nacemos solos y morimos solos. No puedo hacerle entender lo que quiero decir.

5) Neurosis es no hacernos cargo más que de nuestra parte consciente. Esto que hice lo hice sin querer, no soy yo. No soy yo quien tuvo que ver con esto, simplemente me sucedió. No tengo nada que ver con esa situación, soy solo una víctima.

6) Una salida de la neurosis es la muerte o la esquizofrenia, en la que todo es uno. Otra salida, más saludable, es extender la responsabilidad más allá de los límites de nuestra consciencia y tener la flexibilidad de poder sabernos uno aunque juguemos a que somos dos.

7) Me viene del recuerdo un curioso episodio. Iba muy tranquilo parado en un colectivo porteño. Era un hermoso día y el colectivo no venía muy lleno, aunque algunos de los pasajeros estábamos parados. Repentinamente el colectivo clava sus frenos y se inclina violentamente hacia adelante. Una señora que estaba parada cerca mío no logra sostenerse y se estrella con fuerza contra mis costillas. A mí ya me costaba aguantar sostenido del pasamanos semejante frenada, pero de alguna manera logré también sostener a la señora. Cuando la inclinación vuelve a la normalidad, la señora vuelve a su posición inicial sin siquiera dirigirme una mirada. Espero unos segundos y le digo "podría decirme aunque sea un 'disculpe', ¿no?". La señora, con expresión de asco, me responde "¿qué crees? ¿que lo hice a propósito?". Me quedé helado ante su respuesta. La señora , acto seguido, se va hacia el fondo del colectivo y toca el timbre para bajar. Pero otra señora que estaba detrás nuestro, que por lo visto había visto toda la escena, comienza enardecida a insultar de arriba a abajo a la primera, quien se bajaba apurada y con cara de odio . La escena terminó intentando yo calmar a la segunda señora mientras ella me contaba la rabia que le daba ver actitudes así.

8) La señora desagradable del punto 7 no podía aceptar tener que dar respuesta por algo que ella no había hecho con consciencia de acto, de propósito. Ni siquiera respondía por su propio cuerpo sometido a las leyes de la gravedad. Por eso podemos decir que los límites de la responsabilidad en la actitud neurótica es el propio pensar consciente. La libertad está un paso más allá.

domingo, 22 de febrero de 2009

Manipular Simplificado

Me sorprendió que la definición de manipular en la RAE no haga mención a su utilización directa entre seres humanos. Tal vez se me escapa alguna otra palabra que sea como el antónimo de persuadir en lo que respecta a lograr que los demás hagan lo que queremos. Suponiendo que manipular es la palabra, tenemos:

1) Manipular es lograr que el otro haga algo mediante el engaño.

2) Dejemos de lado situaciones claras de abusos (la manipulación de un adulto hacia un menor, de un adulto hacia un adulto con retraso mental, etc.) o de fraudes (engaños penados por la ley, estafas electrónicas, etc.) y vayamos de lleno a las situaciones cotidianas de relaciones humanas en donde entra el corazón. Supongamos la siguiente situación entre los primos Lador y Lado:

Lador: Hola, Lado. Me estoy yendo de vacaciones. ¿Qué te parece si te dejo mi auto? Lo puedes usar para lo que tu quieras y de paso me lo cuidas.
Lado: Me parece bien. No tengo auto y me viene bien tener el tuyo el tiempo que me lo dejes. Acepto.
Lador: Hola, Lado. Necesito que vayas con el auto a buscar un paquete a lo de Lite y lo lleves hasta el centro.
Lado: Muy bien, lo haré.
Lador: Hola, Lado. Necesito que vayas con el auto a llevar a Lite hasta lo de su madre.
Lado: Muy bien, lo haré.

3) En los casos en que la persona manipulada se coloca en posición de víctima y el manipulador en posición de victimario, una vez descubierto el engaño ya no quedan dudas de que la situación puede ser calificada de manipulación, aunque la manipulación sea solamente un juego entre quien manipula y quien se deja manipular.
Si Lado comienza a ponerse en posición de víctima hablando con su amigo Ludo, argumentando que el engaño estuvo en que Lador nunca le explicó los encargos con los que venía el préstamo, y Ludo, quien escucha atentamente a su amigo, logra posicionar a Lador en posición de victimario, entre ellos ya no quedarán dudas de la manipulación perpetrada por Ludor.

Lado: Hola, Ludo. He caído en la trampa de Lador. Me ha engañado prestándome el auto. Soy un idiota, yo pensé que lo hacía inocentemente. Ahora no hay día en que no me llame para pedirme hacer algo con su auto. Nunca me dijo que tenía que hacerle de chofer. ¡No sé qué hacer!
Ludo: Pero qué hijoputa este Lador... ¿por qué no le mandas a que le den por culo?
Lado (especulador): Porque no me prestaría más el auto.
Lado (inseguro): Porque dejaría de hablarme.
Lado (hiperpotente): Porque quién otro podría ayudarlo.
Lado (maternal): Pobre, si me prestó el auto.
Lado (neurótico): Porque no puedo decirle que no.
Lado (esquizoide): Porque tampoco le dije que no le haría de chofer.

4) Cuando las cosas no le salen del todo bien al manipulador, cuando no logra que el otro reaccione como él quiere, puede entonces ponerse él en posición de víctima y diluir su intento de manipulación en un espeso caldo de injusticias y malagradecimientos.

Lador: Hola, Lado. Me estoy yendo de vacaciones. ¿Qué te parece si te dejo mi auto? Lo puedes usar para lo que tu quieras y de paso me lo cuidas.
Lado: Me parece bien. No tengo auto y me viene bien tener el tuyo el tiempo que me lo dejes. Acepto.
Lador: Hola, Lado. Necesito que vayas con el auto a buscar un paquete a lo de Lite y lo lleves hasta el centro.
Lado: Lo siento, estoy ocupado.
Lador: Hola, Lado. Necesito que vayas con el auto a llevar a Lite hasta lo de su madre.
Lado: Lo siento, estoy ocupado.

Lador puede comenzar a sentirse una víctima del engaño y desagradecimiento de Lado.

Lador: Hola, Ludo. He caído en la trampa de Lado. Le he prestado el auto y ahora no hace ninguno de los favores que le pido. Me ha engañado, porque creí que podía contar con él y mi auto que le presté. Pero solo le interesaba tener un auto. Soy un idiota, yo pensé que lo aceptaba agradecido. Ahora me doy cuenta de que me usó ¡No sé qué hacer!
Ludo: Pero qué hijoputa este Lado... ¿por qué no le mandas a que le den por culo y no le prestas más el auto?
Lador (resentido): Eso haré.
Lador (vengativo): Y le contaré a todo el mundo lo que me hizo. Ustedes tampoco deberían prestarle más nada.
Lador (víctima): A él no, pero seguiré confiando en la gente.
Lador (neurótico): Pero tendría que haber hecho lo que le pedí. ¿Cómo me hizo esto?
Lador (esquizoide): No se le puede prestar el auto a nadie. La gente es toda joputa y malagradecida.

5) Claro que no hay victimario sin víctima. Recuerdo una hermosa frase que fue escrita en el puente por donde pasa Juan B. Justo sobre Córdoba. Alguien (oculto como yo en el anonimato) durante años escribió allí en frases gigantes sus enseñanzas filosóficas. Una decía "dentro de toda víctima hay un victimario". En el punto 3, Lador podría perfectamente haber estado actuando de buena fe y no haber sentido ningún rencor en el caso de que Lado no hubiera aceptado alguno de sus pedidos. En el punto 4, Lado podía haber actuado también de buena fe y haber aceptado el auto sin ningún tipo de compromiso más allá de cuidarlo, que fue lo que realmente se hizo explícito en el punto 2. Incluso, si tomamos la situación del punto 2, tanto Lador como Lado podrían haber seguido actuando sin posicionarse en víctimas, más allá de los pedidos que Lado aceptara o no. Posicionarse en víctima (o ver víctimas) es el detonante.

6) Sin embargo todos estos puntos no excluyen la posibilidad de que tanto Lador como Lado tuvieran algunos datos sobre el otro más allá de los presentados aquí. Lador podría detectar una tendencia enfermiza de Lado a intentar cumplir con todos los favores que le piden quienes le prestan algo que él necesita. O bien Lado podría intuir que Lador está convencido incuestionablemente de que si él ofrece un favor a alguien, ese alguien no puede rechazar un favor que él le pida. Alguien me dijo una frase una vez que aún sopeso tratando de aprender algo de ella: "Si yo acerco una chispita al otro, y el otro explota porque estaba lleno de explosivos, no puedo decir que no tuve nada que ver con semejantes destrozos. Soy responsable al menos de haber acercado la chispita". Responsable no significa culpable, y la idea no es dejarnos de acercarnos chispitas y quedarnos todos a oscuras. Sino de intentar aprender a quién conviene acercarle nuestra luz y a quién no, sin temor a que cada tanto se oigan unas vitales explosiones.


miércoles, 18 de febrero de 2009

Determinismo vs No Determinismo

1) En la base de mi religión y mis creencias, se encuentra el no determinismo. Esto es, la creencia en que algo en este universo no está determinado por leyes, y más específicamente que ese algo es el libre albedrío humano.

2) El libre albedrío es la capacidad de elegir libremente, con autodeterminación, entre más de un solo camino. Alguien alguna vez dijo que el ser humano no es libre de elegir sino de optar, entendiendo a la elección como el decidir las características del camino a transitar y a la opción como el decidir qué camino tomar entre posibles ya determinados. Creo que aunque lo más usual sería esto de optar, si unimos varios actos de opción entonces llegamos a caminos que antes no existían y que más que determinados por leyes están construidos mediante opciones emprendidas (por no llamarlas optadas ni elegidas y confundirme aún más).

3) Simplificando el punto 2 (haciendo honor al muchas veces ignorado título de este blog): creo que en casi todo momento tenemos poder de elegir entre más de una opción, y la mayoría de las veces entre muchas más que dos opciones.

4) El casi del punto 3 se debe a la única excepción de estar dominado físicamente. Un ejemplo puede ser estar encadenado a una pared. Otro más realista, el caso Eluana. Se podría especular con una libertad que aún perduraría en el pensar, en la actitud con que uno se tome la extrema situación. Pero la considero despreciable.

5) En cualquier otra ocasión, creo firmemente en el libre albedrío. Si me apuntan una pistola en la cabeza y me dicen de hacer algo o me matan, incluso ahí veo la libertad de decisión (no, claro está, una libertad de ciudadanía defendida por leyes de una comunidad; me refiero simplemente a la libertad humana, no a los conceptos sociales modernos de libertad). Puedo optar por dejarme matar, optar por obedecer, optar por intentar huir sin que me peguen las balas, optar por intentar desarmar al del arma, y varias opciones más que dependerán siempre de mi criterio frente a las posibilidades de realizarlas que vea en el mundo, equivocándome o no.

6) Para los que creen en el determinismo, la cuestión es más fácil. Es como afirmaba hace muchos años un gran amigo de apellido Bugarín: todo lo que hacemos está previamente determinado. Tomando un estado del universo en un momento dado, y conociendo a fondo sus leyes, podríamos hipotéticamente reconstruir todo el universo hacia atrás en el tiempo y hacia adelante, hasta sus límites mismos.

7) Para los no deterministas que creen en el libre albedrío (dejemos de lado por ahora a los estrafalarios no deterministas que NO creen en el libre albedrío), las preguntas se encaminan hacia los límites del libre albedrío. Mi pensamiento podría ser calificado de no determinista casi radical porque veo muy pocas excepciones al ejercicio del libre albedrío. Si un ser humano tiene salud, entonces tiene libre albedrío. En cambio un determinista es siempre radical por definición, aunque pocos puedan sostener esta filosofía en todo momento.

8) Mi amigo Bugarín podía dar la impresión de sentirse miserable por momentos. Pero él se sentía tan nada dueño de su destino como consideraba a los demás nada dueños de los suyos. Jamás se ponía en posición de víctima, porque de última pensaba que todos éramos víctimas, lo cual hacía desaparecer al concepto. No actuaba como un miserable porque para él el universo era miserable, así que no había particularidades en la miserabilidad. De hecho, Bugarín era un persona generalmente alegre y muy querido por toda persona con la que se cruzaba (hablo en pasado porque hace mucho no tengo noticias de él, imagino que seguirá igual o al menos me gusta recordarlo igual para los efectos de este post).

9) Algún sabio dijo algo así como que la sabiduría está en qué hacemos con lo que nos toca en suerte. Ahí está la libertad y en el ejercicio de la misma se encuentra la felicidad, aunque muchas veces se crea erróneamente que la felicidad es un imposible que resultaría de poder moldear el mundo a gusto.

10) Después están los mutantes. Los mutantes creen que hay momentos de determinismo y momentos de no determinismo. Creo que hasta hubo un filósofo mutante así, más o menos famoso, que hoy día aparece en los diccionarios de filosofía. Pero incluso en el caso de este filósofo, sus teorías acerca de cómo limitan determinismo y no determinismo son disparatadas e infantilmente caprichosas. O sea, el mundo es determinista cuando les conviene y no determinista cuando también les conviene. Generalmente los momentos deterministas les sirven para hacerse las víctimas y los momentos no deterministas para mandar a la mierda a alguien. El colmo de cuantos conocí así era una compañera de trabajo que sostenía que ella solamente era libre cuando estaba de vacaciones.

viernes, 13 de febrero de 2009

¿Inteligencia o interés?

1) Hay quienes sostienen lo que Frank Black canta en una canción. "Soy solo otro de los del diez por ciento. Mi mente es como un océano y yo estoy colgando del muelle". Parecería que de la potencialidad de nuestro cerebro, nos encontramos la mayor parte del tiempo utilizando no más que un diez por ciento de la misma.

2) Dejando de lado las malformaciones y accidentes que claramente afectan el uso del cerebro (mogólicos y Einstein en una misma bolsa), ¿por qué un ser humano logra mayores méritos que otro en una actividad determinada?

3) Suele usarse la explicación "porque es más inteligente". Pero siempre logramos encontrar en el "menos inteligente" capacidades o potencialidades que no explican su menor mérito.

4) Inteligencia en este caso es un atributo determinista, que intenta justificar las acciones de una persona determinándolas desde la cuna de sus genes. El conformismo de ser un fracasado y poder decir "lo que habría podido hacer si hubiese sido más inteligente". Puede resultar reconfortante para el fracasado conformista, pero resulta una pésima enseñanza para el que quiere aprender algo de la vida.

5) Interés es un concepto que creo reemplaza a inteligencia en estos casos, y ofrece una explicación no determinista del asunto. "Lo que habría podido lograr si me hubiese interesado más", que deriva acto seguido en la más optimista frase "lo que puedo llegar a lograr si me intereso más".

6) El lograr un mayor interés en algo requiere generalmente de un gran esfuerzo y sin lugar a dudas de un acto de fe. Puedo tener un padre interno que me inste a estudiar física atómica. Y también un yo que haya aprendido que en la vida, para profundizar en un tema (y ser considerado inteligente por los conformistas), debo tener un interés en el mismo. Pero me encontraría en una difícil situación si a mi niño interno la física atómica solamente logra sacarle bostezos. Si no tengo en cuenta a mi niño interno (al igual que si eligiera no tener en cuenta a mi padre interno), mis intereses quedarían divididos y, a no ser que posea una gran fe en que el camino entrevisto vale un gran sacrificio, lo más probable es que termine fracasando en mi empresa y que algún psicoanalista clásico me tilde de neurótico.

7) Distinto es el niño interno al que le brillan los ojos con varios temas de la carrera de físico atómico, pero que se aburre con algunas de las tareas para lograr terminar los estudios. No debemos confundir falta de disciplina con falta de interés.

8) El interés tiene también un importante componente que escapa a nuestra decisión consciente, por lo que también es un excelente indicador de a qué dedicarse en la vida. Mis intereses por la física atómica nunca pasaron más allá de dos o tres preguntas en mi cabeza y de dos o tres documentales sobre el tema. Mejor dedicarme a eso que me ocupa la mayor parte de lo que sueño.

9) Un acto que es pura astucia y beneficios para quien lo aplica, es el de lograr una metáfora entre lo soñado y lo aplicado. Si mi sueño es ser un superhéroe o un mago de gran poder, por más interés que tenga en llegar a serlo, es raro que lo logre. A no ser que entienda que ser un policía es como ser Batman o ser un hacker es como ser un mago. O que escribir historietas de superhéroes es como llegar a serlo, o pintar cuadros de maravillosos colores es el ejercicio de una gran magia. Mi sueño onanista entra en armonía con el mundo en el que vivimos. A algo así Freud llamaba sublimación.


martes, 10 de febrero de 2009

El caso Eluana

1) Eluana permaneció en estado vegetativo luego de un accidente automovilístico en 1992. Anoche murió luego de que su equipo médico dejó de alimentarla gradualmente.

2) También anoche los legisladores italianos intentaban hacer ley una prohibición de dejar de alimentar artificialmente a pacientes que dependan de ella. Probablemente la ley también incluyese a quienes no hacen otra cosa que depender de su alimentación artificial, como Eluana.

3) En la película de David Cronenberg, The Dead Zone (mejor ver una película de Cronenberg que leer un libro de King), Christopher Walken despierta, luego de estar cinco años en coma por un accidente automovilístico, para salvar al mundo.

4) En uno de los últimos capítulos de South Park, Kenny McCormick es mantenido artificialmente con vida luego de un accidente automovilístico. Luego de ser desconectado, Kenny muere y salva al mundo (este capítulo es sencillamente imperdible; búsquenlo).

5) Opiniones médicas no daban ya chances a Eluana para despertar. Probablemente otros médicos pondrían en duda esta opìnión (los médicos siempre tienen dudas, por las dudas).

6) Aunque muy poco se conoce sobre las vivencias subjetivas en los estados comatosos, y mucho menos sobre las "vivencias" subjetivas luego de la muerte, dudo de que haya alguien en este mundo que considere que ambos estados (el coma y la muerte) sean lo mismo para quienes los padecen (no ambos simultáneamente, claro está).

7) La idea de haber mantenido a Eluana con una supuesta vida todos estos años, o bien se debe a una esperanza en que despierte, o bien se debe a que se considera al estado comatoso mejor que el estado "no vivo".

8) Debe haber límites a la esperanza. En algún momento la esperanza se agota. Que la tecnología médica actual sea capaz de mantener un cuerpo humano respirando y con un mínimo de actividad cerebral, no significa que la vida se alargue para siempre ni que la esperanza se extienda al infinito.

9) Para la filosofía católica, la muerte debe ser natural. Nadie entiende qué catzo significa "natural". Si natural es sin intervención humana, entonces Eluana murió naturalmente. Si natural es con intervención humana, entonces Eluana murió naturalmente. Así el concepto natural es simplificable y nos queda: Eluana murió. Es raro que un término así (natural, natural) sea utilizado por personas que creen en Dios, cuando históricamente este término sirvió como eufemismo ateo para nombrar de alguna forma la vacante que dejaba el dios del que los ateos correspondientes descreían.

10) Eluana murió. Que ahora pueda descansar en paz y que nunca sepamos cuán grande puede ser la tortura de ser mantenido en ese estado durante tantos años.

viernes, 6 de febrero de 2009

Psicología de la responsabilidad y los sentidos delirantes

1) Un psicótico es quien no se hace responsable por ninguno de sus actos, sean estos conscientes o inconscientes.

2) Un neurótico es quien se hace responsable de sus actos conscientes, pero no de sus actos inconscientes.

3) El psicoanálisis clásico, dicho a lo oriental, apunta a "hacer consciente lo inconsciente". La idea es que un neurótico se haga responsable de todos sus actos (en cuyo caso dejaría de ser un neurótico, tarea considerada imposible para el propio psicoanálisis; cuanto menos metas uno se pone, menos fracasos tiene).

4) Dicho de una manera más lacaniana, el psicoanálisis apunta a "abrir sentidos". Que el neurótico encuentre sentidos a sus propios actos. Darles un sentido es un primer paso hacia el logro de responsabilizarse por ellos.

5) El sentido que se abre intenta ser un sentido "razonable", o mejor dicho socialmente compartido, o incluso mejor dicho: un sentido con el que esté de acuerdo el analista. Un psicótico le encuentra sentidos a sus actos, pero sentidos delirantes, o mejor dicho que el analista encuentra delirantes. El verdadero delirio del psicótico no está en sus atribuciones de sentido sino en utilizar estos sentidos o interpretaciones contra el resto del mundo para no hacerse cargo de sus propios actos.

6) Un artista puede llenar sus obras de sentidos delirantes y, si es astuto, generalmente no logra más que elogios y buen dinero. Los sentidos delirantes no son malos en esencia, pero pueden ser utilizados para el mal como hacen los psicóticos.


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jueves, 5 de febrero de 2009

¿Existen las víctimas?

1) No se puede ser víctima de haber nacido, ni de las leyes físicas del universo, ni de la materia, ni del Ser, ni del Misterio, ni del Gran Moco Cósmico que todo lo une.

2) Ser víctima significa que una acción no incluída en el punto uno cayó sobre mí y yo no puedo ser responsable de haber estado justo ahí donde la acción me cayó. Ejemplo: una caja fuerte cae sobre mi cuna mientras duermo un sueño apacible después de haber sido amamantado; la responsabilidad de haber puesto la cuna en tal peligroso lugar no es mía, como tampoco fue mía la elección de meterme en la cuna, aunque admito lo cómodo que se estaba ahí hasta la caída de la caja fuerte.

3) Hace poco pasó: voy caminando por Pinamar volviendo de mi trabajo y de golpe me cae un botellazo desde un balcón y me parte la cabeza. Soy un adulto y soy responsable de estar caminando por donde estaba caminando. Esto no significa que podía prever la posibilidad de un botellazo en tales circunstancias. Se necesitan más datos para saber si soy una víctima. Pero sea una víctima o no, no tiene relación alguna con la responsabilidad de los que me arrojaron la botella. Que yo haya podido tener un indicio de que estaban por tirar un botella del balcón o que haya sido imposible para mí darme cuenta de que semejante cosa iba a suceder, no modifica en nada la criminalidad del acto de arrojar una botella por un balcón. EN NADA. Una creencia popular argentina parecere sugerir que si uno no fue víctima de la situación, entonces se la merece por boludo y es más culpable que el que cometió el acto criminal.

4) Volviendo al caso del punto 3, supongamos una situación. Voy caminando, me llama la atención el jolgorio desmedido en un balcón. Noto que el balcón está cargado de borrachos que me ven, me gritan cosas inentendibles y me hacen gestos. Noto también que a los pies del balcón hay pedazos de botellas rotas, probablemente arrojadas por los borrachos luego de haberles bebido el contenido. Pienso: "no van a arrojar una botella justo cuando paso yo, no pueden ser tan hijos de puta". Paso y me como el botellazo. No soy una víctima de la situación, lo que no significa que no hayan cometido un crimen contra mí en donde salí muy perjudicado. Tampoco significa que soy un niño que aún no aprendió las lecciones básicas. Esta para mí es una lección avanzada, una de esas lecciones que se siguen aprendiendo durante toda la vida. No hay duda de que voy a aprender algo de toda la situación si logro ver mi parte en los actos... y si sobrevivo al golpe, claro está.

5) Otra situación siguiendo la del punto 3. Voy caminando, no oigo ruidos ni noto señal alarmante alguna. Me cae un botellazo. Me despierto en el hospital y me cuentan lo sucedido. Me resulta una historia extraña, ajena, que me cuesta creer (aunque la rajadura en el cráneo no hace más que confirmármela). En esta situación me resulta muy difícil aprender algo. Me siento una víctima, alguien que lo único que hizo fue pasar por ahí, hacer lo que todos hacen siempre y no les pasa nada. ¿Qué puedo aprender de toda esta situación ridícula?

6) Capítulo de Kung Fu: Kane de niño es mandado al pueblo junto con otro estudiante a realizar unas compras. Al salir del pueblo de regreso al monasterio, un hombre les aconseja volver por el camino del bosque para evitar los ladrones. Los niños agradecen y toman el camino del bosque. En medio del bosque son asaltados. Al regresar al monasterio, el maestro le pregunta al otro estudiante qué aprendió de la situación. El estudiante responde: "a no confiar en extraños". Luego le pregunta a Kane qué aprendió. Kane responde: "a esperar lo inesperado". El maestro echa del templo al primer estudiante y sonríe a Kane.

7) El magistral movimiento de Kane no es haber llegado a una frase paradójica desde el punto de vista occidental, sino de haber llegado a una enseñanza. El logro de haber cosechado una fruta dulce de un árbol que parecía seco. El otro estudiante cosechó una fruta amarga y venenosa.

8) Si de la situación del punto 5 aprendo que es mejor no caminar más por las calles de Pinamar ( o de todas las ciudades del mundo), merezco que me echen del templo.

9) Ser víctima es una situación incoveniente cuando busco mantenerme fuerte o serlo aún más. Cuanto más débil me sienta en una situación, más me debilitaré encasillándome como víctima. Aunque las víctimas existan (y la mayoría de ellas sean niños), siempre me fortalecerá poder verme como activo en la situación y poder encontrar algo para mejorar en mi actuar.

10) ¡Qué difícil ser Kung Fu en una sociedad que invisibiliza y manipula las situaciones para hacer aparecer a todos como víctimas!



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martes, 3 de febrero de 2009

¿Cuándo se empieza a ser responsable?

1) Según nuestra actual ley, se es mayor de edad a los 21 años. Hay responsabilidades con la ley que ya comienzan a los 18, pero dado que a los 21 se tienen la totalidad de derechos y obligaciones que marca la ley, podemos afirmar que uno es completamente responsable de sus actos a partir de los 21 años... según la ley.

2) Las mayorías de edad que marcaban la entrada a la adultez en las diversas culturas de la humanidad variaban de unas a otras. Pero en todas se aceptaba que en algún momento el ser humano comenzaba a ser responsable de sus actos.

3) Desde un punto de vista psicológico los límites no están tan claros. La edad a partir de la cual una persona es completamente responsable de sus actos varía también según las épocas y según las personas. Lo que está claro es que hay un momento en la historia de cada ser humano en que alguien responde por éste, y un momento en que la persona ya responde por sí misma. Un momento de niñez y un momento de adultez. Y que estos momentos tienen indefectiblemente un correlato de maduración biológica.

4) Para considerar que un adulto es completamente responsable de sus propios actos (puede dar respuesta de lo que ocasiona con sus propios actos), es necesario además creer en el libre albedrío de éste. Si no soy libre de elegir, no puedo dar respuesta de haber elegido una opción por sobre otra, no puedo dar respuesta de para qué actúo como actúo.

5) Un niño nunca es completamente irresponsable. Podríamos afirmar que su responsabilidad tiende a cero cuando su edad tiende a cero. Uno no se convierte repentinamente en responsable el día en que se recibe de adulto. La niñez (y la adolescencia) es el largo camino que a uno le permite llegar a ser responsable de sus propios actos. Hasta entonces el peso de la responsabilidad está puesto del lado de quienes responden por ese niño: principalmente los padres (adultos) y secundariamente la sociedad.

6) Durante el camino hacia su adultez, el ser humano recibe distintos tipos de herramientas que le permitirán responsabilizarse de todos sus actos. Esto va más allá de la educación parental o institucional que una sociedad le brinde intencionalmente (aunque de este lado vendrán valiosas herramientas extras). Tiene más que ver con los inevitables límites que la sociedad y el mundo van poniendo durante ese camino, e incluso con una capacidad innata de maduración de herencia animal que nos permite entender que al ejercicio de un acto se asocia una respuesta más o menos coherente por parte del entorno (jamás conocí un animal adulto que intentara no hacerse responsable de sus actos, aunque sus respuestas extrañamente jamás son verbales).

7) Llegado a la adultez el ser humano, al igual que el animal, aprendió que sus actos traen consecuencias, que no se puede actuar gratuitamente. Que si se es libre de actuar de una u otra manera entonces se es responsable de esa constante e inevitable elección en el actuar.

8) Es que en realidad lo único que uno puede hacer es no responsabilizarse de sus actos en discurso y/o siendo apañado por los demás. El mundo más allá de la cultura, siempre responsabiliza a sus seres obrando en consecuencia con sus aún no del todo conocidas leyes. El animal que se demora un poco más en seguir comiendo la tierna hierba ante el depredador que lo acecha, responde con su tierna carne.

9) La capacidad de dar respuesta por los propios actos, o sea la capacidad de responsabilizarse por los propios actos, es una capacidad necesaria para lograr la plenitud de ser humano, no suficiente. Un paso más allá es lograr responsabilizarse también por los actos de otros. Esto no significa restarle responsabilidad al otro, sino sumarle un actuar en consecuencia, un acto de acompañamiento.

10) Poder responder por los propios actos es la fortaleza. Poder responder por los actos de los demás es el amor. No se puede amar desde la debilidad.